La trinchera digital

Proyecto “La trinchera digital”         

Vivimos tiempos difíciles, tiempos en los que las ideas y propósitos tradicionales de eso que llamamos izquierda parecen haber sido definitivamente derrotados. Sabemos que no es así, pero que gran parte de las izquierdas políticas hayan acabado por ser atlantistas o se hayan fragmentado en identidades que a menudo se ignoran entre sí no permite concebir grandes esperanzas.

Y, sin embargo, debemos seguir luchando. No vamos a dar la batalla por perdida tan fácilmente. Cada uno en lo suyo, según sus aptitudes y posibilidades.

Al menos eso pensamos, desde una modestia infinita, en El Viejo Topo. Somos conscientes de que somos todavía muy poca cosa, que nuestras fuerzas son escasas y nuestras carencias enormes, pero a tozudez y ganas no va a ganarnos nadie.

Cuando en 1975 decidimos unos pocos jóvenes inexpertos lanzarnos a la aventura de lanzar una revista exponente del pensamiento de las izquierdas de entonces, la situación no era mejor que ahora, ni mucho menos. Pero a pesar de la censura, de las amenazas, de los Tribunales, de los secuestros, nos fue posible aportar algo al necesario debate entre las izquierdas. Hoy las condiciones son otras, no hay secuestro de ejemplares, ni denuncias, ni procesamientos, aunque también hay más desánimo, más dudas, más extravío. Hoy es tanto o más necesario el debate que en aquellos años, un debate que se aleje de la politiquería cotidiana hecho desde el pensamiento crítico y la discusión libre de ideas.

Por eso en El Viejo Topo querríamos dar un paso más, llegar a más lectores en estos tiempos en que lo digital desplaza al papel y lo breve a lo extenso. No para obtener unos beneficios económicos que jamás han existido, sino para contribuir desde esa modestia a la que he hecho referencia a las ideas de unas izquierdas que algunos han calificado de desnortadas.

Para ello, hemos diseñado un proyecto de crecimiento, que con solo nuestras fuerzas no podremos abordar, al menos en su totalidad. Un proyecto, que paso ahora a describir, ambicioso y al tiempo modesto, para el que necesitamos tu ayuda.

 El proyecto está formado por:

1) Alojamiento de webs y material audiovisual propio y de grupos afines.

Una queja recurrente en grupos y asociaciones que utilizan las redes sociales para sus labores de información y crítica es la desaparición de vídeos y otros materiales colgados en YouTube, Facebook, Instagram, etc. que son borrados por dichas empresas sin posibilidad de recuperación. Se trata, obviamente, de censura. Nosotros mismos hemos tenido incidentes en ese sentido.

El proyecto contempla la adquisición de servidores propios con capacidad para alojar, además del Topo, a entidades y asociaciones que lo requieran y teman ser sometidos a censura, y situar ese servidor en un ámbito seguro. Se implantaría en forma de sistema redundante: dos servidores clones con IP diferentes. En caso de ataque o bloqueo de la IP que aloja las páginas webs o los contenidos audiovisuales que contienen, se conecta automáticamente el otro servidor con IP diferente liberando las webs y contenido, dando tiempo a la defensa y desbloqueo de la IP sin dejar de estar en línea, quedando el material siempre a disposición de quienes lo han depositado.

2) Topo TV. Hasta ahora, el canal Topo TV ha tenido una actividad escasa, apenas unos balbuceos. Por falta de medios –físicos y económicos– no ha sido posible más que iniciar un aprendizaje. Pero las posibilidades del canal son inmensas: Organización de debates, coloquios, entrevistas a los autores de los libros que editamos y otras personalidades de interés, retransmisión en streaming de los actos que organicemos, etc. Un Topo TV con contenidos de interés podría ser el embrión de proyectos futuros que hoy pueden parecer simples ensoñaciones, pero quizá mañana… (pensemos, sin pretender establecer una comparación, lo que ha sido el proyecto Byoblu TV, y cómo nació).

3) Ciclo “Reconstruir la izquierda”. Aunque de tanto en tanto El Viejo Topo ha organizado charlas o debates presenciales con ese título, ha sido de forma discontinua y evitando en lo posible incurrir en gastos. El propósito es el de darle al ciclo mayor continuidad y utilizar el streaming para dar la mayor difusión posible a esos contenidos, dedicando un cierto presupuesto para invitar a personalidades relevantes.

4) La versión digital de la revista está alojada en una página estadounidense (ISSU, que además solo utiliza la lengua inglesa), en la que no ejercemos ningún control y de la que recibimos una información muy escasa, lo cual nos plantea serias dudas acerca de su funcionalidad. El proyecto contempla la creación de una plataforma propia.

5) Tener disponible en la web una versión digital de toda la colección de El Viejo Topo, desde el número 1 (números extras incluidos). Proseguir el proceso de digitalización de los libros de El Viejo Topo, actualmente ya más de cien.

6) Recientemente hemos inaugurado un podcast con una grabación más o menos mensual. Se trataría de doblar esa periodicidad.

*     *

Hasta aquí, lo que nos gustaría hacer. Todas estas iniciativas requieren inversión en medios técnicos, espacios digitales y personas que deben desempeñar las funciones asociadas (filmación, montaje, sonido, etc.). Si quieres –y puedes– ayudarnos, conviértete en socia/o partícipe de este proyecto, suscribiendo una o varias participaciones en él.

Quizá te preguntes qué es un socio partícipe. Es quien adquiere una o más participaciones en el proyecto; por ellas no recibe dividendo alguno. Sí obtiene algunas ventajas materiales, como:

—Un libro obsequio (en papel o en versión digital) a elegir de nuestro catálogo por cada participación.

—Descuento del 10 % en todos los libros de El Viejo Topo y en la suscripción de la revista impresa durante tantos años como número de participaciones adquiridas.

—Acceso gratuito a la colección histórica digitalizada de la revista, cuando esté disponible.

¿Cómo convertirse en socio partícipe de este proyecto?

Basta con adquirir una o varias participaciones, siendo el valor de cada una de ellas de cien (100) euros a través de esta plataforma, donde podrás hacer tu aportación tanto con tarjeta, transferencia o paypal.

Recibirás un certificado que te acreditará como poseedor de las participaciones que habrás adquirido, así como un código personal para acceder a las ventajas materiales que otorga esa posesión.

Si lo deseas, puedes recibir atención telefónica al respecto en el teléfono 937550832 cualquier día laborable por la mañana o enviarnos un correo a info@edic.es.

Sea como sea, te agradecemos tu atención y, si te es posible, tu ayuda. Entre todos seguiremos sembrando y así, tarde o temprano, podremos recoger la cosecha. Nos vemos en la trinchera.